infraestructuras criticas ciberseguridad
Infraestructuras críticas y ciberseguridad es una cuestión que obsesiona a empresas (públicas y privadas), organizaciones e instituciones públicas.
El mundo digital crece cada día, y también los riesgos de ciberataques. La amenaza de los ciberataques a las infraestructuras críticas es real y urgente, teniendo en cuenta el daño que puede causar un ataque exitoso.
Desde el transporte hasta el suministro de agua, casi todos los sistemas que mantienen el normal funcionamiento de la sociedad tienen el potencial de ser comprometidos por los hackers. Aunque pueda parecer un escenario aterrador, las empresas y los organismos públicos están tomando las medidas necesarias para proteger sus operaciones de las ciberamenazas.
Sus esfuerzos son también la razón por la que más del 90% de las organizaciones de infraestructuras críticas españolas cuentan con programas de gestión de riesgos cibernéticos. Cada organización tiene un nivel de riesgo diferente basado en factores como los requisitos normativos y los procedimientos operativos.
En este blog podrá verse todo lo relacionado con las infraestructuras estratégicas, así como cómo se protegen de los ciberataques.
Un ciberataque es cualquier intento malicioso por parte de un hacker que utiliza software para interrumpir el funcionamiento de los servicios a de ordenadores o redes. Existen varios tipos de ciberataques, todos ellos con objetivos diferentes.
Los dos tipos más comunes de ciberataques son el software malicioso (malware) y los ataques de denegación de servicio (DoS). Cada una de estas categorías contiene varios tipos específicos de ataques. El malware puede utilizarse para robar información o dañar el hardware, mientras que los ataques DoS inundan los servidores con peticiones para dejarlos inutilizables.
Cuando se trata de infraestructuras críticas, los ciberataques pueden tener efectos devastadores. Algunos ejemplos son el cierre de las redes eléctricas, la contaminación de los sistemas de agua o la inutilización de los sistemas de transporte.
Estos ataques pueden tener importantes consecuencias económicas y físicas. Las infraestructuras críticas incluyen sistemas que son fundamentales para mantener el funcionamiento de la sociedad y la economía. Las infraestructuras críticas también se denominan «activos críticos». Algunos ejemplos de activos críticos son:
Cuando se trata de proteger las infraestructuras críticas de las ciberamenazas, es importante entender la diferencia entre riesgo y vulnerabilidad. El riesgo es la probabilidad de que algo ocurra, mientras que la vulnerabilidad es la probabilidad de que el sistema sea explotado si el riesgo se materializa.
Cuando se trata de proteger infraestructuras críticas, el riesgo siempre está presente. Sin embargo, puede reducirse aplicando controles preventivos o de detección. Los controles preventivos intentan detener las ciberamenazas antes de que se produzcan, mientras que los controles detectivescos trabajan para identificar y responder a los ciberataques mientras se producen. Hay varias formas de proteger las infraestructuras críticas de los ciberataques, entre ellas:
Una cultura de ciberseguridad tiene cinco características. Entre ellas se encuentran:
Cuando se trata de proteger las infraestructuras críticas de las ciberamenazas, es importante entender la diferencia entre riesgo y vulnerabilidad. El riesgo es la probabilidad de que algo ocurra, mientras que la vulnerabilidad es la probabilidad de que el sistema sea explotado si el riesgo se materializa.
Una vez que entienda estos dos conceptos, podrá empezar a explorar formas de reducir el riesgo de ser víctima de un ciberataque. Cuando se trata de proteger su infraestructura crítica de las ciberamenazas, es importante entender la diferencia entre riesgo y vulnerabilidad.
El riesgo es la probabilidad de que algo ocurra, mientras que la vulnerabilidad es la probabilidad de que el sistema sea explotado si el riesgo se materializa. Una vez que entienda estos dos conceptos, podrá empezar a explorar formas de reducir el riesgo de ser víctima de un ciberataque.
Las infraestructuras críticas son una parte esencial de la vida diaria que mantiene a las personas seguras y sanas. Sin embargo, el mundo digital crece cada día, y también los riesgos de ciberataques. Estos ataques pueden tener efectos devastadores en las infraestructuras críticas, incluyendo el cierre de las redes eléctricas, la contaminación de los sistemas de agua y la inutilización de los sistemas de transporte.
Para reducir el riesgo de ciberataques a las infraestructuras críticas, las organizaciones están tomando las medidas necesarias para proteger sus operaciones de las amenazas. Sus esfuerzos son también la razón por la que más del 90% de las organizaciones de infraestructuras críticas cuentan con programas de gestión de riesgos cibernéticos.
Cada organización tiene un nivel de riesgo diferente basado en factores como los requisitos normativos y los procedimientos operativos.
Si quieres saber algo más, respecto a este interesante tema te recomendamos este post de La Vanguardia.